20 agosto 2020

TACOS ALTOS

FEDERICO JEANMAIRE

“Sospecho que hay un momento de la vida en el que cada hombre o cada mujer descubren quiénes son. Lo saben. De repente. Frente a una instancia crucial o frente a un hecho insignificante. Da lo mismo. Yo, en cambio, todavía no sé quién soy. Y, por no saber, ni siquiera sé si es que ya me convierto en una mujer o aún me falta un poco de tiempo”.

Los tacos altos son los zapatos que nos ponemos las mujeres cuando queremos estilizar nuestro cuerpo, cuando nos queremos arreglar, cuando queremos ser más altas, cuando queremos vernos diferentes, cuando el pie nos lo pide, cuando probamos combinaciones. En cualquier caso: cuando nos apetece.

Su Nuam (“Su” es llanura, y respeto; “Nuam” es genial, y ardiente) es una chica de quince años que se pone esos tacos para parecer mayor. Y al principio ella no quiere eso, porque se da cuenta que, si cede, le tocará emprender su propio camino laboral y, en contrapartida, su camino también hacia la edad adulta.

Pero es inevitable. Todos nos hacemos mayores. Todos, algún día, maduramos. Y Su Nuam le ha tocado madurar entre dos ciudades; entre dos partes de una misma familia; entre dos lenguas. Y, para colmo, le ha tocado vivir un accidente terrible al que, con tan poca edad, intenta ponerle palabras.

Sea como sea, esta es la historia de Su Nuam, escrita de su puño y letra en un cuaderno. Y como todo diario personal, a veces aparecen errores gramaticales, puesto que para ella escribir bien los tiempos verbales no es tan importante como dice su profesora de español.

Ay, Su Nuam. Si hubieras sido mi alumna seguramente me hubiera reído mucho contigo. Tu inocencia te hace noble. Has escrito un buen cuaderno. Has hecho una buena introspección. No te suspendería por nada del mundo.